7 de agosto de 2008
Hoy he bajado por primera vez a la calle después del accidente. Ha sido difícil manejar la silla de ruedas para entrar en el ascensor sólo, sin la ayuda de mi mujer. Me temblaban las manos cuando apreté el botón que me llevaba a la planta baja. ¡Menos mal que las puertas se abren solas y no tuve que empujarlas!
Llegué a la calle sudando y me quedé al lado de un banco que hay cercano a mi portal, debajo de la sombra de un árbol, creo que es un tipo de ficus pero de los que se hacen grandes. No es que el paisaje sea muy agradable porque al lado de mi casa pasa una calle de dos carriles por la que siempre circulan coches, ya que es una de las principales entradas al pueblo, pero la verdad es que me entretuve mucho mirando a los coches pasar y fijándome en la cara de la gente. Creo que hasta ahora no me había dado cuenta de las prisas que llevan la mayoría, la cara en tensión con la que pasan a mi lado otros… ¡Sí, al fin y al cabo no ha estado mal el día!
14 de agosto de 2008
Hoy ha pasado algo curioso. Llevo ya una semana bajando por las tardes a la calle, me pongo siempre al lado del mismo banco. Veo los coches pasar, hasta ya distingo los que pasan a la misma hora. Me entretengo mirando los pájaros cuando no hay personas a las que observar. Cuando llevaba una hora sentado, ha llegado Juan, creo que es el vecino del octavo, nunca habíamos hablado más que el típico saludo de cortesía cuando te cruzas. Estaba reticente pero me ha contado que lleva meses en el paro, ha recurrido a todas sus amistades, ha enviado todos los curriculums habidos y por haber, ha estado en decenas de entrevistas, le han dado literalmente con la puerta en las narices… está en una situación desesperada. Lleva una semana viéndome por su balcón y hoy, sin saber porqué ha bajado a hablar conmigo.
21 de agosto de 2008
¡Ya somos tres! Nelson es el hijo del vecino del quinto. Es un chico enfermo. En el bloque sabemos que sufre depresión, eso es lo que dicen, pero su mirada perdida a veces indica que es algo más, no sé, no soy médico pero tal vez sea algo más profundo. Lleva meses sin salir de casa porque su enfermedad ha derivado en agorafobia y siente pánico ante la sola idea de abandonar las cuatro paredes de su piso… pero lleva una semana viéndonos a Juan y a mi por la ventana y ha bajado a charlar con nosotros.
28 de agosto de 2008
Esto si que es bueno. Yanira, la vecina rara del bajo se ha unido al grupo. El caso es que los tres nos lanzábamos miradas curiosas puesto que habitualmente es una persona conflictiva en el bloque. Su trabajo, si es que le podemos llamar así, es un tanto molesto, digamos que tiene amigos que pagan sus facturas y la visitan habitualmente por la noche. Empezó con una mirada de lo más insinuante que iba pasando de uno a otro, pero luego ha salido su sonrisa más sincera y nos ha contado mil cosas sobre su vida y su terrible infancia.
7 de septiembre de 2008
Ha concluido el verano. Ya vuelve el bullicio a las calles, las prisas, los atascos… Hoy durante nuestra tertulia se ha puesto a llover, el caso es que no nos apetecía dejar la conversación que manteníamos sobre la gente que siempre se queja de todo lo que le pasa en la vida, sin ver más allá… así que propuse entrar en la cafetería de la esquina. No es que nuestra situación económica sea de lo más boyante pero para un café si había. Marcelo, el dueño de la cafetería Diamante nos llevaba viendo hablar todo el mes, y con los cafés nos ha traído unos bollos por cortesía de la casa, y ha terminado uniéndose a la conversación. Lo cierto es que el negocio no le va todo lo bien que quisiera pero hay que resistir en tiempos de crisis, ya que sólo los que aguantan abiertos sobreviven y mantienen a la clientela.
14 de septiembre de 2008
La incorporación de esta semana no deja de sorprenderme. Somos un grupo de lo más variopinto, doña Remedios, es una mujer muy mayor, ya no puede vivir sola por lo que sus tres hijos se la llevan cuatro meses cada uno para atenderla. Ha llorado mucho acordándose de su casa y de cuando se valía por si misma. Entre todos hemos tenido que hacer un esfuerzo para hacerla sonreír. Al final lo hemos conseguido, pero lo mejor es que ha dicho que nos va a enseñar a todos a hacer punto. Me parto de la risa imaginándome la escena.
21 de septiembre de 2008
¡Tenemos una mascota! Ayer mientras estábamos enfrascados en una conversación sobre los toros, en esto no hay manera de poner de acuerdo a los que defienden a muerte (y nunca mejor dicho) la fiesta nacional de aquellos que como yo sufren con la suerte del toro, bueno pues se nos acercó un gato, todo sucio y “despeluchado”, el caso es que no era un gato, sino una gata y por su aspecto debía haber tenido cachorros hacía poco, estaba famélica. Nelson corrió a su casa y bajó cartón de leche y una lata de atún. La gata se lo devoró en un minuto y levantando la cola, sin una mirada de agradecimiento, pues esa es su naturaleza, se marchó.
28 de septiembre de 2008
Ya vienen de dos en dos. Hoy se han incorporado al grupo María y Javier. La verdad es que me han conmovido. Viven en la calle desde hace dos años, duermen en el coche que es lo único que les queda. El banco les quitó el piso cuando dejaron de hacer frente a la hipoteca. No trabajan, sólo sobreviven. No es mala gente pero están tan desesperados que ya casi ni les queda dignidad, como se puede ver en su mirada “gacha”. Ninguno podemos ayudarles materialmente pero he visto como agradecían que les permitiéramos hablar y no les echásemos con cajas destempladas. Ya llevan demasiados fracasos en sus espaldas.
7 de octubre de 2008
Como sigamos así nos vamos a tener que buscar una sede oficial. Cuatro nos sentamos en el banco, yo en mi silla de ruedas y los demás se bajan taburetes. Cuando la cafetería no está muy llena Marcelo nos presta sillas. Hoy además Doña Remedios nos ha dado un recital, resulta que en sus años mozos, como ella dice, era cupletista, hasta que su “José” la retiró casándose con ella. Nos hemos divertido mucho y hasta un cliente de la cafetería, al que no conocíamos, al escucharla cantar se ha arrancado a acompañarla en “Ojos verdes”. De broma hemos dicho que eran como el Dúo Pimpinela, además el chico se llamaba Joaquín, para más casualidad.
14 de octubre de 2008
Lo de hoy no tiene nombre. Ha venido el programa de televisión España Directo a grabar nuestra tertulia. Todos hemos participado contando nuestras vidas y experiencias. Al principio estaba tan nervioso que hasta tartamudeaba pero luego ha sido fantástico y creo que hemos sabido reflejar el auténtico sentido de la amistad que es lo que nos une…y también la esperanza.
21 octubre de 2008
Si llego a saber que me va a pasar esto no hubiera salido en televisión. Me han llamado de dos programas más, uno incluso del extranjero. Me van a pagar el viaje y hasta 500 euros por aparecer… Dicen que yo soy el promotor de la idea pero no se dan cuenta de que no ha sido así.
Yo sencillamente decidí bajar a la calle y dejar de estar en casa lamentando mi mala suerte, decidí dejar de revivir una y otra vez el fatídico accidente del que yo no tuve la culpa pero que me ha dejado en una silla de ruedas para todo lo que me queda de vida.
Yo sencillamente decidí escuchar a Juan, a Nelson, a Yanira, a Marcelo, a doña Remedios, a la Gata, a Javier y María, a Joaquín…dejé de compadecerme de mi y de ellos, elegí vivir con mis circunstancias y no morir lentamente entre recuerdos del pasado. Elegí sonreír al presente y no llorar por un futuro que no es.
Patricia Rómer ©2009
